BLOG DE CIENCIA Y FICCIÓN

CHARLTON HESTON vs SOYLENT GREEN

Escrito por nekoland el . Posteado en CINE

Pongámonos en antecedentes para a continuación hablar sobre esta maravilla de la ciencia ficción que es “SOYLENT GREEN” (1974) en su versión original y “Cuando el destino nos alcance” en castellano:

Las organizaciones mundiales señalan que el hombre ha rebasado el límite de lo que la tierra puede producir, entrando en déficit con los recursos para la sostenibilidad para una población de 7.200 millones que en 2050 alcanzará  los 9.600 millones. El combustible fósil se agota y se pasa a extraer aquel que antes se consideraba poco rentable, de extracción peligrosa y que además de contaminar más, es menos eficiente. Las economías emergentes creen que es su turno y se niegan a bajar la producción en pos de la salud del planeta. Las energías alternativas están lejos aún de ser una realidad viable a corto e incluso medio plazo aunque intenten hacer creer lo contrario. Los gobiernos dedican cada vez más recursos a sistemas de vigilancia y armamento…

Perdón, por alguna razón he confundido los datos a la hora de escribir este artículo, estos son sobre la situación actual, disculpen la molestia y por favor sigan leyendo, ahora sí nos centraremos en el argumento de la película que nos ocupa:

edwardLa acción de “Soylent Green” discurre en un supuesto futuro superpoblado en el que el ser humano en su afán por seguir la cada vez más acelerada carrera industrial ha terminado por contaminar el planeta hasta un punto de no retorno. La vida animal se ha extinguido, así como la vegetal. Como indica el personaje de “Sol Roth” el compañero del protagonista encarnado por Edward G. Robinson: ”Una ola de calor durante todo el año. Es como vivir en un invernadero…” Básicamente sobreviven a partir de un compuesto llamado “Soylent”, no muy distinto al actual pienso para perros, que ha sacado al mercado su nuevo  producto: “Green” compuesto por algas marinas y de mayor calidad que el “Soylent Red” hecho a base de vayas de soja.

  elysi

Esa distópica sociedad está conformada por tres grupos: Un gobierno formado por la industria y la política (culpables en última instancia de esa apocalíptica situación) que gozan de todos los privilegios, sin que se haya ninguna diferencia entre ambos, una fuerza de seguridad a su servicio preocupada tan solo por no perder su empleo y las ventajas que eso significa,  y el resto, la población mayoritaria que sobrevive día a día como buenamente puede. Lo que viene a ser un contexto típico de la Ciencia Ficción usado recurrentemente a lo largo de los años, sin ir más lejos tenemos el actual ejemplo de “Elysium (2013)”. Pero lo que hace especial a “Cuando el destino nos alcance” es el tipo de ciencia ficción que representa: una historia basada en las personas, en la sociedad y no en factores tecnológicos. No se trata de máquinas que toman el poder, no hay naves espaciales ni barreas tecnológicas como en Elysium que sometan al hombre, es la ciencia ficción en estado puro: el humano vs su futuro. Una teorización sobre las consecuencias de la irresponsabilidad del ser humano gestionando sus recursos, algo que por supuesto enseguida tachamos de absurdo ya que al fin y al cabo es sólo ciencia ficción. Pero que nos obliga, una vez no tenemos ningún factor ajeno como extraterrestres, o malvados robots, a hacernos dos simples preguntas: ¿Por qué sabemos que eso no llegará a ocurrir? y ¿Quién seriamos nosotros dentro de esa historia? Tal vez todos nos identifiquemos con el protagonista, en definitiva sólo un idiota se dejaría engañar de esa forma por el gobierno que fuese. Tal vez el problema esté en la plebe de ese futuro imposible, ganado, gente estúpida que no ve más allá de sus narices,  incapaces de enfrentarse a la autoridad como muestra el personaje del guarda espaldas que afirma no ser tan tonto como para golpear a un agente de la ley. Corderos en un mundo de lobos. ¿Y quién quiere ser cordero? El film habla de cómo paulatinamente los mismos responsables del desastre, poco a poco se erigen como la única alternativa a la supervivencia. La gente va aceptando la nueva realidad, adaptándose, asumiendo roles que antes resultaban denigrantes. Convirtiéndose en “mobiliario”.

Nosotros por supuesto no. A buen seguro saldríamos a las calles a protestar sin importarnos que las cada vez más numerosas e informatizadas fuerzas del orden quisieran impedírnoslo. Es una película cruda, desalentadora, ha de ser absurda porque un futuro así resultaría horrible. Y en eso radica la belleza de esta, a mi juicio, obra de arte de la ciencia ficción. Es carne contra carne, humanos y sentimientos, relaciones, amor, lealtad, egoísmo, principios, todo lo que somos como especie llevado a un hipotético juicio.

Pero el título de este artículo es “Charlton Heston vs Soylent Green” por una razón que va más allá de esta película. Se podría considerar parte de una trilogía dentro de la filmografía de este genial actor. EL planeta de los simios (1968).  El último hombre vivo (1971). Cuando el destino nos alcance (1974).

charlPelículas de ciencia ficción que estaban fuertemente comprometidas con la política de la época y que desataron fuertes críticas por antiamericanas, impropias racialmente y de carácter subversivas entre otras lindezas de los grupos más conservadores. Protagonizadas todas ellas por un incómodo Charlton Heston comprometido desde los años sesenta con temas como la integración y los derechos civiles junto a Martin Luther King.

ni

En las que se representaba relaciones interraciales como en “El último hombre vivo”.

inq Duras críticas sobre la intolerancia religiosa, como ocurre en este mismo film al hacer una más que evidente referencia a la inquisición española.

sim

O sobre el peligro de las armas atómicas en “El planeta de los simios”.

Si se han fijado he procurado no hacer ningún spoiler importante como invitación al visionado. ¿Por qué? Porque en definitiva son tres grandes películas del género de la ciencia ficción cuya mejor y más eficiente crítica, no siendo un servidor tan lerdo como para creer que puedo aportar algo mejor destripándolas, es invitar a verlas o revisiónalas si es el caso. Y tal vez después alguien se anime a contestar a una de esas dos preguntas: ¿Por qué sabemos que eso no llegaría a ocurrir? ¿Cuáles son los pilares en los que podemos depositar nuestra confianza en un mejor futuro? ¿Lo que nos dice los gobiernos y los medios de comunicación?

Etiquetas:, ,

"Trackback" Enlace desde tu web.

Deja un comentario