Entre los siete condenados figuran grandes nombres de la ciencia en Italia, como el profesor Enzo Boschi, quien presidió el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología, y el subdirector de la Protección Civil, Bernardo De Bernardinis.
La defensa basó sus alegatos en la imposibilidad de predecir los terremotos, para lo cual presentó como aval la opinión de varios expertos que coinciden en esta misma tesis. Diversos científicos alrededor del mundo han calificado de ridícula la sentencia debido a que no existe un método infalible de pronosticar los terremotos. Más de 5.000 miembros de la comunidad científica escribieron una carta abierta al presidente de la República italiana, Giorgio Napolitano, en la que aseguraron que un terrremoto es imposible de predecir.
La fiscalía pedía cuatro años de cárcel, mientras que la defensa solicitaba la absolución de todos ellos, según informan los medios italianos. Tras cuatro horas de deliberación y poniendo fin a un juicio que arrancó en septiembre, el juez Marco Billi ha condenado a los expertos a seis años de prisión.
"Para mí fue una masacre cometida por el Estado. Con este juicio esperamos que nuestros hijos puedan vivir en un mundo más seguro", agregó Aldo Scimia, cuya madre murió durante el seísmo.
La defensa de los acusados anunció que presentará recurso contra la sentencia, que prohíbe además que los científicos ocupen cargos públicos por el resto de sus vidas.
"Estoy abatido, desesperado. Creí que sería absuelto, todavía no comprendo de qué fui declarado culpable", señaló Enzo Boschi, ex director del Instituto Nacional de Geografía y Vulcanología.
Los científicos advierten además de que la sentencia que condena a siete expertos en sismología por el terremoto de L’Aquila puede provocar que, a partir de este momento, los científicos tengan miedo a la hora de hacer previsiones. "Desde ahora será muy difícil hacer apariciones en público para hablar de la actividad sísmica en Italia, vista la posibiidad de que los investigadores puedan ser denunciados por omisión o por crear alarma", se queja Stefano Greta, actual director del Instituto Nacional italiano de Vulcanología y Sismología.
"A partir de ahora, los científicos que trabajan en el campo de los desastres naturales se lo pensarán dos veces antes de hacer previsiones, incluso si creen tener datos suficientes paraque una previsión sea atendible", vaticina por su parte el geofísico británico Bill McGuire.
"La sentencia ha tenido lugar en el país de Galileo. Hay cosas que no cambian nunca", se lamenta Michael Halpern, del la Unión de Científicos Preocupados, quien desde hace tiempo se ocupa de denunciar las interferencias políticas en el mundo de la ciencia.
Para el abogado Filippo Dinacci, defensor de dos científicos, se juzgó en base "al derecho de la Edad Media".
- [elmundo.es] Una condena 'como en los tiempos de Galileo'
- [huffingtonpost.es] Cárcel para siete funcionarios y científicos italianos por no prevenir el terremoto de L'Aquila
- [laindustria.pe] Seis años de prisión para sismólogos por no prever terremoto
- [rnw.nl] Sentencia inédita en Italia contra científicos por no haber previsto un sismo