Siempre ha habido controversia respecto al contenido de ciertos productos, sobre todo, los de cadenas de comida rápida como las hamburguesas o los perritos calientes.
Existen muchos prejuicios acerca de lo que comúnmente se llama “comida basura”, y no son pocos los que miran con malos ojos las hamburguesas que se venden en restaurantes de comida rápida.
Lo que faltaba era un estudio que dijera que ha aparecido ADN humano en las hamburguesas. Son los resultados de un estudio realizado en Estados Unidos, por Clear Labs, una empresa dedicada al análisis genético de alimentos.
Analizaron 258 hamburguesas que se venden actualmente en Estados Unidos, y se llevaron algunas sorpresas; como que una contenía restos humanos y tres de ellas, ADN de ratas.
Para el estudio, se tomaron muestras de hamburguesas de conocidas marcas de establecimientos minoristas y hasta algunas congeladas que se venden en los supermercados. Además, no solo analizaron las de carne, también dedicaron un apartado para analizar las hamburguesas vegetarianas. Muchas, no cumplían con las normativas de seguridad e higiene.
Existen muchos prejuicios acerca de lo que comúnmente se llama “comida basura”, y no son pocos los que miran con malos ojos las hamburguesas que se venden en restaurantes de comida rápida.
Lo que faltaba era un estudio que dijera que ha aparecido ADN humano en las hamburguesas. Son los resultados de un estudio realizado en Estados Unidos, por Clear Labs, una empresa dedicada al análisis genético de alimentos.
Analizaron 258 hamburguesas que se venden actualmente en Estados Unidos, y se llevaron algunas sorpresas; como que una contenía restos humanos y tres de ellas, ADN de ratas.
Para el estudio, se tomaron muestras de hamburguesas de conocidas marcas de establecimientos minoristas y hasta algunas congeladas que se venden en los supermercados. Además, no solo analizaron las de carne, también dedicaron un apartado para analizar las hamburguesas vegetarianas. Muchas, no cumplían con las normativas de seguridad e higiene.
Sin embargo, el propio informe aclara que, aún siendo muy desagradable, «la presencia de ADN de ratas o de humanos, no tiene por qué ser dañino para la salud».
Lo que muchos consumidores no saben, es que algunas cantidades de ADN humano o de ratas, pueden formar parte de un rango normativo aceptable.
El ADN humano encontrado no vendría de algún cadáver, simplemente, podría tratarse de alguna uña, pelo o trozo de piel que cayó accidentalmente, en la mezcla de carne picada.
La investigación también trató de denunciar la publicidad engañosa que hacían algunas hamburgueserías, y los resultados, les dieron la razón. Uno de los productos se vendía como “compuesta con frijoles negros”, y luego, no se encontró nada de esa legumbre, en el laboratorio. Otros engaños los hallaron con algunas hamburguesas que se anunciaban como 100% vegetarianas, pero que después, resultaban contener carne animal. En 12 casos, las hamburguesas superaban, de largo, las calorías del etiquetado.
También hallaron una judía negra, en una hamburguesa que no decía que contenía dicho producto.
Pero el peor de los datos descubiertos en la muestra, es que el 4,3% de las 258 hamburguesas analizadas, contenían ADN de patógenos, los cuales puede causar enfermedades intestinales en los consumidores.
Fuentes: