Bueno, yo la verdad es que, y lo reconozco, suelo poner muchas comas. Me gusta ponerlas aunque a veces, no sea imperiosamente necesario... (simplemente para que la lectura se haga más espaciada, evitando así un conjunto de palabras demasiado largo sin espacios para respirar)
La cuarta estrofa, objeto de discusión y si creo entenderte, quedaría así;
El frío de los glaciares
se agolpa irreverente,
donde nace profundo
el horizonte del misterio.
Per fíjate que yo hasta le pondría otra coma;
El frío de los glaciares
se agolpa, irreverente,
donde nace profundo
el horizonte del misterio.
Sea como sea, véase la utilidad entonces de poner comas, pues al carecer en principio de ellas, yo no supe leerlo bien.
A mi realmente me ayudan a leer mejor.
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