No quiero divagar como los anteriores a mí lo hicieron.

Ya he comentado en varias ocasiones sobre la superioridad fragante de la vida biológica, aparentemente imperfecta, frente a las máquinas que construimos los humanos.

Hay que dejar claro que desde luego no hay perfección en nada de lo que construimos, puesto que nosotros mismos somos imperfectos.

Yo pienso que la imperfección es perfecta, y que los fallos desde el punto de vista de la evolución son más importantes de lo que creemos.

Estemos hechos de moléculas orgánicas, que por otra parte se crean solas en lo más profundo del Universo, o de moléculas inorgánicas, de alguna manera todos los seres vivos de la Tierra son máquinas.

Una simple bacteria está a años luz desde el punto de vista evolutivo, con respecto al más potente ordenador jamás soñado.

Que bonito es el orden y la perfección, pero en el Universo no hay orden, el orden es la nada, y para que pueda haber un Universo tienen que haber zonas más o menos densas de materia.

Empiezo a pensar en algún trastorno por parte del señor Admin, y he llegado a esta conclusión por su obsesión continuada por la perfección, concretamente por la supuesta perfección de las máquinas.

Quien sabe hacía donde evolucionará el ser humano, pero desde luego no es una mejora tener que cambiar piezas cada dos por tres, no olvidemos la obsolescencia programada que incitaría a las empresas fabricar las piezas de los humanos artificiales deliberadamente defectuosas, para así aumentar las ventas de repuestos.

Vamos que si un día todos los seres humanos somos robot, seguro que vivimos hasta que dure la garantía, es decir, unos dos años, desde luego esto no es una mejora frente a la esperanza de vida actual que supera los 70 años.

La naturaleza es sabia, es posible que en algún momento de la historia, unos humanos se conviertan en cíborg súper medicados y llenos de partes artificiales, y otros humanos evolucionemos a seres mágicos con poderes extraordinarios.

De todas formas de alguna manera ya somos cíborg gracias a las prótesis dentales y articulares, los marcapasos, por la sustitución del cristalino en las operaciones de cataratas, y por los implantes para sordos cocleares, o por las bombas de insulina, etc.

Bueno, aunque solo somos cíborg en apariencia, estos implantes no dejan de ser unos parches para seguir viviendo lo mejor posible, pero el resto de nuestro cuerpo sigue siendo de carne y hueso...........