Mueve brazo robótico utilizando el pensamiento
Erik G. Sorto es la primera persona con una prótesis neural implantada en una región del cerebro donde se forman las intenciones. El dispositivo se implantó quirúrgicamente en el cerebro de Sorto en abril de 2013 y desde entonces se ha estado entrenando. Sorto refinó su control del brazo, de forma que ahora es capaz de ejecutar tareas avanzadas con su mente, como controlar un cursor de ordenador; beber una bebida; dar un apretón de manos y realizar diversas tareas con el brazo robótico.