Nos enseñan desde la niñez a ser desconfiados con los pobres y poner en ellos todas nuestras precauciones. Muchos creen con temor que tampoco debe darse muchas ayudas a los parados o personas sin recursos porque luego "hay mucho abuso" y que se les debe dar lo justo por eso de la picaresca. Parece que lo importante en prestaciones de desempleo y ayudas es que ese dinero ¡oigan! se regala así que está justificado todos los medios para "controlar".

Sin embargo una persona que cobre un sueldo del estado y no cumpla con su trabajo yo creo que también se le está regalando el dinero o un funcionario que pide una baja para opositar a un cuerpo superior. O una persona con un generoso sueldo y aún así regatea con el limpiabotas o trata de declarar a Hacienda dos perras. NO, claro, es más importante controlar a los que menos tienen. Pues yo no participo de ese prejuicio señores/as.