El mío creo que fue “Animal, vegetal o mineral” de Amstrad CPC.

Una suerte de inteligencia artificial primitiva que intentaba adivinarte qué pensabas, y aprendía a través de las preguntas de discriminación que tú le ibas añadiendo.

Era realmente cutre, pero tenía su gracia. Aún recuerdo haber creado un bestiario fantástico gracias a este programa (¿Quién quiere vacas o petunias, si puede tener orcos o zombis?), que descansa en algún cassette polvoriento olvidado en el desván.



https://www.youtube.com/watch?v=m0SWW0sR0rI