Con 80 años, María Santos ha dejado, incluso, de salir con alguien a tomar un café.
Los graves temblores que sufre desde los 40 años le impiden realizar con normalidad actividades cotidianas como escribir, coser o comer.
Afortunadamente, Todo ha cambiado.
El Germans Trias es primer hospital público catalán que incorpora la tecnología de ultrasonidos de alta intensidad. Allí, María se ha sometido a una técnica innovadora que no requiere cirugía y cuyos resultados son inmediatos: ya ha dejado de temblar.
Al paciente se le coloca una especie de casco desde el que se envían haces de ultrasonidos que atraviesan el cráneo y confluyen en el hipotálamo. Luego, mediante una quemadura los ultrasonidos inutilizan las células causantes del temblor.
De momento, en el centro hospitalario la efectividad de los ultrasonidos a través de resonancia magnética es superior al 75%. Tres de los pacientes se han recuperado totalmente y los otros ya han mejorado muy significativamente.