Crítica y Análisis de Turbo Kid (2015)
Hoy os quiero hablar de Turbo Kid: una película homenaje a los años ochentas, que pese a su minúsculo presupuesto cumple en su apartado visual. Se trata de una cinta canadiense y neozelandesa del 2015 rodada en Quevec, que combina cine post-apocalíptico, aventuras, comedia, y acción con abundantes dosis de gore.
Turbo Kid nos cuenta la historia de un futuro post-apocalíptico en el que la Tierra ha sido devastada por la lluvia de ácido y la contaminación; y el agua y la comida, son un bien escaso.
Esta es una película de planteamiento nostálgico (personas de 30 a 50 años, la pueden disfrutar mucho), pero que cuenta con alicientes suficientes como para cautivar también a otros sectores de público.
Estamos ante un producto disfrutable. Un despropósito bizarro, con un humor irreverente que lo hace simpático y atrayente