DESIDIA, es decir negligencia o inercia. Usamos con mayor frecuencia el vocablo en su primera acepción y referido más bien a tareas físicas: limpia los platos con desidia y los deja sucios y gastando mucha agua por ejemplo.
En cambio puede ser un componente fundamental de la voluntad aunque en el sentido negativo. Según Hegel "una voluntad que no decide nada no es una voluntad real. La persona carente de carácter no llega nunca a la decisión (...) y es que como bien dice este gran filósofo el que se decide se limita (eso es carácter) y "al determinarse se compremete con la finitud, se pone límite". Y aquí vuelvo a la DESIDIA algo que es fomentado de forma clara porque es más productivo "no cerrarse puertas", estar en la indefinición y poder estar al sol más caliente. Y volviendo a Hegel: "la desidia no quiere salir del estado indistinto en el que conserva una posibilidad universal. Pero la posibilidad no es aún la realidad. La voluntad que está segura de sí no se pierde por tanto en lo determinado" Y es que LA PERSONA CON DESIDIA NADA DECIDE Y POR TANTO NO ES LIBRE, porque la decsión es la realización de la libertad. [Hegel, Principios de la filosofía del derecho]