Os recuerdo que, resumiendo, la ciencia ficción dura se caracteriza por presentar una especial preocupación por la precisión científica y la lógica de los acontecimientos. Mientras que la ciencia ficción blanda es más fantasiosa y carece de rigor científico. En este artículo os lo cuento más extensamente.
Bien. Lo que vamos a hacer hoy es seguir hablando de películas que podríamos considerar de ciencia ficción dura.
La primera película de ciencia ficción dura de hoy es Interstellar, del 2014. Dirigida por Christopher Nolan y protagonizada por Matthew McConaughey y Anne Hathaway entre otros, el film nos cuenta como un grupo de exploradores viajan más allá de nuestra galaxia para descubrir algún planeta que pueda garantizar el futuro de la especie humana.
Interstellar ha sido recomendada en el ámbito docente por su labor divulgativa y presenta elementos científicos muy interesantes, pero para ser justos, también se toma algunas licencias bastante atrevidas.
Por ejemplo: Los intrépidos astronautas viajan a través de un agujero de gusano para llegar a su destino, pero la existencia de estos agujeros es puramente especulativa. Y de existir, hasta se ha dicho que seguramente serían intransitables.
Otra cuestión es que después de desplegar una encomiable tarea de investigación científica para elaborar el aspecto realista que podría tener un agujero negro desde fuera, nos muestran luego una versión de lo que hay en su interior altamente fantasiosa.
Dejando estos detalles de lado, la película cinematográficamente hablando es excelente, muy entretenida y una buena opción para despertar el interés científico en los jóvenes.
Europa Report (del 2013) es una película dirigida por el ecuatoriano Sebastián Cordero. La primera misión tripulada a la luna Europa tiene como misión determinar si bajo su superficie helada existe o ha existido vida.
Europa Report es una especie de recopilación de los registros de video de la nave, salpimentado con un falso documental de entrevistas a los tripulantes y miembros de tierra de la misión. Un curioso cóctel con el que se justifican algunos flashbacks.
Pero a medida que avanza la película, da la sensación que se usan esas cámaras porque no hay presupuesto para recrear los escenarios, y acabas un poco cansado de los mismos planos.
La construcción de la nave fue pensada desde la revisión de hechos científicos, validando con la NASA todo lo que sería necesario para que los seres humanos puedan realizar viajes en un entorno de gravedad cero.
Lo que tiene de bueno en cuanto a rigor científico falta en el tratamiento de los personajes, y si bien la primera mitad en la que se presentan el viaje y a los astronautas la cinta resulta muy creíble, la segunda mitad se hace, de alguna forma, precipitada.
Dicho esto, la película llega -o incluso supera- el seis de nota en las webs de cine por parte de los espectadores.
También me parece que podría entrar en esta lista Mad Max: Furia en la carretera, del 2015. En una futura Tierra desierta post-apocalíptica donde la gasolina y el agua son productos escasos, Mad Max se une a Furiosa, una comandante fugitiva y su banda, quienes están tratando de escapar de un desalmado señor de la guerra.
Con seis premios Óscar a sus espaldas, esta película australiana dirigida, producida y coescrita por George Miller, y protagonizada por Tom Hardy junto a Charlize Theron, es un buen ejemplo de futuro plausible donde los acontecimientos se tornan bastante asumibles.
La actriz se sinceró en una entrevista al New York Times diciendo que durante el rodaje discutió mucho con Hardy. "Si hubiésemos sido amigos, la película habría sido diez veces peor”, comentó.
Los efectos especiales son en gran medida artesanales, y más del 80% de los FX que se ven en el filme son reales.
El desempeño cinematográfico en general es muy bueno, y la trama, diálogos y sucesos entran dentro de la sensatez y permiten un visionado agradecido para quienes buscan cierta verosimilitud en el guion de una película de ciencia ficción.
Esta entretenida cinta obtiene un holgado notable en las webs de cine.
Podríamos encontrar muchas discrepancias acerca de si Matrix (del 1999) es o no es ciencia ficción dura, pero la mayoría de los elementos que trata son abordados en la actualidad dentro de ramas científicas.
Una posible evolución futura de la IA hasta acabar subyugándonos es tema actual de debate, e incluso se trabaja en un "botón rojo" para poder apagar la inteligencia artificial en caso de emergencia.
También hay científicos trabajando en la llamativa técnica de telecargar datos al cerebro para aprender en poco tiempo.
El siempre controvertido tema de vivir en una simulación es algo que se investiga y suscita todo tipo de temerarios planteamientos, pero Matrix nos ofrece una elegante explicación sustentada en que son las propias máquinas creadas por los humanos quienes lo permiten.
En general, me parece que la primera parte de Matrix podría ser considerada bastante plausible pese a tomare algunas licencias. Otra cosa son las continuaciones, que van rizando el rizo hasta niveles místicos.
Matrix es una extraordinaria cinta que pese a sus detractores, llega -y supera- el ocho de nota en las webs de cine.
Otra película que me habéis mencionado mucho en los comentarios como ciencia ficción dura es Arrival del 2016.
En ella, unas naves extraterrestres comienzan a llegar a la Tierra y los altos mandos militares piden ayuda a una experta lingüista para intentar averiguar si los alienígenas vienen en son de paz o suponen una amenaza.
El relato de Ted Chiang en que se basa la película era de apenas treinta páginas.
Esta cinta de Denis Villeneuve aborda el tema del primer contacto con extraterrestres de forma mucho más sensata de lo que nos tiene acostumbrados Hollywood, pero como os comento en este artículo, en realidad todo apunta a que la comunicación sería mucho más complicada de lo que vemos en la cinta.
Tanto el director como el equipo de guión se esforzaron para lograr que la película tuviese veracidad científica. Por eso, contaron con la ayuda del renombrado científico Stephen Wolfram y su hijo.
La película trata de distanciarse de otros films de este tipo: Tanto en la forma de las naves extraterrestres, como en la forma corpórea de sus tripulantes alienígenas.
Es discutible si los diseños son acertados o no, pero a falta de referencias reales claras, podemos llegar a considerarlos como posibles.
La película obtiene notables en las webs de cine.
Por último, 2001: Una odisea del espacio del director Stanley Kubrick, cambió en los espectadores la imagen que tenían sobre el futuro, cuando fue estrenada en 1968.
Marcó un hito por su estilo de comunicación visual, sus revolucionarios efectos especiales, su realismo científico y sus proyecciones vanguardistas.
Son numerosos los chismes que presentó y acabaron siendo realidad décadas después, así como notoria la suma elegancia de sus efectos visuales y extraordinaria puesta en escena desde una perspectiva astronáutica.
Estudiaron las naves espaciales, los gadgets y cada aspecto científico: desde el comportamiento de los monos de la primera parte, a la física de la ingravidez o cómo serían las máquinas 30 años después.
Como siempre sucede cuando aparecen elementos alienígenas en una película, cada cual sopesará la viabilidad o no de los sucesos derivados de ello. Pero es indudable que el profundo asesoramiento que obtuvo de la NASA y otras empresas aeroespaciales de la época, permitió una exposición de sucesos y enfoque significativamente riguroso.
Esta cinta -aviso, no apta para todos los paladares-, tiene una magnífica nota de alrededor del ocho en las webs de cine.
Bueno, pues es todo por hoy. Podéis seguir sugiriéndome películas de ciencia ficción dura para futuros vídeos.
¿Cuál de estas películas te parece más de ciencia ficción dura?
¿Y la que menos? ¿Cuál te gusta más?
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