Un recurso muy utilizado en películas y series, pero NO, el cloroformo no es capaz de adormecer a alguien instantáneamente. Para conseguirlo, tendrías que estar con el paño en su boca 5 minutos seguidos (y al quitárselo, enseguida despertaría).
2- Los Velocirraptores no son como dicen.
¿Quien no ha visto ese temible dinosaurio en la pantalla, con sus afiladas garras y la piel verde? Pues no existen, o al menos no de ese modo. Los velocirraptores reales eran dinosaurios del tamaño de un perro y llenos de plumas.
3- Los coches no explotan al chocar.
Bueno, algo parecido pueden hacer, pero no de esa manera tan bestia de las películas. Cuando un coche explota, se asemeja más bien a un pequeño incendio de gasolina que a una verdadera explosión.
4- La Coca-Cola no deshace la carne.
Este mito resulta de lo más fácil de desmontar. Simplemente toma un filete de carne, ponlo en un recipiente con la bebida, y espera dos días a ver qué pasa. Pues nada. El filete sigue tan campante.
5- La penicilina no la descubrió Fleming.
En efecto. Fue Ernest Duchesne, estudiante del Instituto de Medicina Militar de Lyon. Treinta y dos años antes que Alexander Fleming, el francés encontró un hongo con la propiedad de matar bacterias, pero los científicos de la época no le hicieron ni caso.
6- Los toros no se excitan al ver el color rojo.
Así es. En realidad, ni siquiera pueden distinguirlo, ya que estos animales son daltónicos y solo son capaces de diferenciar el blanco, el negro y algunos tonos de grises. Lo que enfurece al animal son los movimientos que el torero realiza con la capa. Bueno, a parte también del puteo que arrastra por el maltrato recibido.
7- El cáncer no es una enfermedad moderna impulsada por el hombre.
La verdad es que esta enfermedad ha existido siempre desde tiempos inmemoriales y ni mucho menos, es algo que haya inventado el ser humano en un laboratorio.
8- El Brontosaurus nunca existió.
Otro mito dinosáurico que se va al garete, porque todos tenemos en la cabeza ese gigantesco y carismático herbívoro de las películas. Pero la verdad es que fue un error al montar fósiles que no fue oficialmente reconocido hasta 1979 (año en que el Brontosaurus, fue eliminado completamente de los expedientes de la paleontología).
9- Las moscas viven más de 24 horas.
¿Quién no ha escuchado eso de que las moscas viven tan sólo 24 horas? Pues bien, la próxima vez que uno de estos insectos te esté haciendo la vida imposible, recuerda que su tiempo promedio de vida es de entre 20 y 30 días.
10- No existe un producto químico para evidenciar que alguien orinó en el agua.
Alguien ya debió haberte engañado con aquella vieja historia de que existe un producto en el agua que cambia de color si alguien orina en ella. Pues ve sabiendo que dicha información no es verdadera, pero es muy útil para mantener las cosas saludables dentro de una piscina.